Muchos problemas plantea la toponimia, incluso Isidoro de Sevilla en sus 'Etimologías' llegó a afirmar que el nombre de Hispania proviene de Ispani (nombre fenicio de Hispalis) y cuya idea en la Edad Moderna fue seguida por Antonio de Nebrija diciendo que Hispania era una deformación del topónimo Hispalis que significaría Ciudad de Occidente y que, al ser Hispalis la ciudad principal de la península, los fenicios y luego los romanos dieron su nombre a todo el territorio.
Desde este blog venimos defendiendo la sevillanía del Real Betis Balompié en artículos como éste o éste. Pero hemos encontrado una documentación que habla por si sola. En ella se puede leer que en la Antigüedad se llamaba a la ciudad de dos maneras: Betis (o, más bien, Baetis) y Spal (más tarde Hispal o Hispalis y que con el tiempo y el paso de las civilizaciones dio lugar al nombre actual de Sevilla). Ambas significaban lo mísmo sino que eran lenguas distintas.
Diccionario geográfico-histórico de la España Antigua: tarraconense, bética y lusitana, Volumen 1, pag. 41
Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar (Definición de 'Betis').